PARA LA MASA

harina 250 g
sal 1 cucharada
ricota 200 g
manteca 100 g
leche 1/2 pocillo
harina para la mesa cantidad necesaria
huevo para pincelar 1

PARA EL RELLENO

aceite 1 cucharada
espinaca cocida exprimida y picada 1/2 kg
almidón de maíz 2 cucharadas
leche 1/2 taza
queso blanco 100 g
queso rallado 2 cucharadas
sal y pimienta a gusto

MASA

Colocar la harina, la sal y la ricota en un bol.
Agregar la manteca.

Unir los ingredientes hasta formar una masa tierna.
Agregar, de ser necesario un poco de leche.
Envolver en papel film y dejar reposar en la heladera durante 2 horas.

Retirar.
Estirar las 2/3 partes de la masa sobre una mesa enharinada hasta obtener 5 mm de espesor.

Forrar con la masa un molde desmontable de 24 cm de diámetro.
Presionar bien en la base y los costados, dejando sobresalir 1 cm del molde.
Reservar en la heladera.

RELLENO

Poner aceite en una sartén y llevar a fuego moderado.
Saltear la espinaca.
Agregar almidón de maíz disuelto en la leche.
Cocinar unos minutos hasta formar una preparación cremosa.

Retirar.
Adicionar el queso blanco y el queso rallado.
Salpimentar y mezclar.

ARMADO

Retirar la masa en la heladera.
Volcar el relleno en el molde.
Estirar el resto de la masa y cubrir el relleno.
Realizar un repulgo.
Pincelar con huevo.
Cocinar en horno precalentado a temperatura moderada por aproximadamente 50 minutos.